¿Deberían los consumidores estadounidenses poder devolver los préstamos con dinero en efectivo?

El impacto de la COVID-19 sigue viéndose y sintiéndose en todo el mundo, incluyendo importantes golpes a la economía mundial. Las medidas de distanciamiento social han forzado el cierre de muchas empresas y han hecho que el desempleo se dispare. Incluso las personas que han estado trabajando de forma constante durante toda la pandemia han tenido dificultades y se han encontrado viviendo de cheque en cheque, especialmente en Estados Unidos, donde el 63% de la sociedad se enfrenta a este problema.

En abril de 2020, la tasa de desempleo estadounidense se disparó por encima del 14%, ya que las empresas se vieron obligadas a cerrar debido a las regulaciones gubernamentales de distanciamiento social, y aunque la recuperación económica está en marcha todavía queda camino por recorrer. El impacto de la COVID-19 sobre el empleo ha afectado de forma desproporcionada a los hogares de bajos ingresos, por lo que muchas personas se quedaron sin recursos económicos suficientes para cubrir las facturas mensuales. No es de extrañar que pedir préstamos para cubrir estas facturas y otros gastos cotidianos haya sido una solución para muchos.

Los trabajadores perciben cada vez más ingresos en efectivo

Tras el aumento del desempleo, el cierre de empresas y la reducción de los ingresos fijos, más personas han buscado formas alternativas de obtener ingresos, como unirse a la economía gig. Los trabajadores de la economía gig tienen menos probabilidades de recibir sus salarios de la nómina mensual de la empresa como depósitos directos en una cuenta bancaria. En consecuencia, aumenta la posibilidad de que los salarios se paguen en efectivo.

Para ayudar a los que más han sufrido a lo largo de la pandemia, el Gobierno de Estados Unidos firmó una ley de rescate de la pandemia por valor de 1,9 billones de dólares, el segundo paquete de ayuda de este tipo. Para aquellos que reúnan los requisitos para recibir el cheque de estímulo, el pago proporciona hasta 1.400 dólares por individuo. Aquellos que no tengan una cuenta bancaria registrada en el Gobierno de EE.UU., incluidos los que estén excluidos financieramente (generalmente los hogares de bajos ingresos que necesitan el pago con mayor urgencia) recibirán el cheque de estímulo que se pagará en efectivo después de los que tengan acceso a una cuenta bancaria.

Para estos consumidores que esperan es aún más probable que los cheques de estímulo se utilicen para pagar préstamos acumulados. Teniendo esto en cuenta, es vital garantizar que aquellos que están financieramente excluidos no sean penalizados injustamente y tengan las mismas opciones de pago y libertades que los demás.

La importancia del dinero en efectivo en EE.UU.

Según nuestro informe de investigación del consumidor 2020 Lost in Transacción: El impacto de COVID-19 en las tendencias de pago de los consumidores, el 60% de los consumidores estadounidenses afirmó que el efectivo es la forma de pago más fiable en caso de crisis y el 75% se preocuparía si ya no pudiera acceder al efectivo. Estas estadísticas demuestran que el efectivo es un método de pago que muchos estadounidenses utilizan y aún desean utilizar.

Aceptar dinero en efectivo por Internet

Aproximadamente siete millones de hogares en EE.UU. carecen por completo de servicios bancarios y muchos más están infrabancarizados. Esto puede restringir gravemente el acceso a los servicios financieros digitales cuando los únicos métodos de pago disponibles son los pagos con tarjeta o las transferencias bancarias. Esto incluye el acceso a los préstamos cuando los reembolsos dependen en gran medida de las transferencias bancarias directas. Además, también es probable que el beneficiario realice la mayoría de los pagos de sus préstamos de la misma forma que recibe sus ingresos, y teniendo en cuenta el número de personas que se pasan a la economía gig, aumenta la importancia del efectivo como método de pago. Tendría sentido que estos consumidores pudieran reembolsar sus préstamos utilizando su método de pago preferido.

Las soluciones eCash permiten realizar pagos en efectivo de forma digital y eficaz. Se puede integrar un código de barras en la factura y enviarlo directamente al individuo por correo o descargarlo digitalmente y llevarlo a un lugar de pago, donde se escanea y se completa la transacción en efectivo. Esto significa que el pago digital se realiza en efectivo sin ninguna interacción física con el proveedor de servicios de préstamo.

Hay otros grupos de consumidores que podrían encontrar atractiva la oportunidad de reembolsar los préstamos con dinero en efectivo. Por ejemplo, aquellos que aún sienten que existe un estigma en torno a tener un préstamo de día de pago. Al permitir el efectivo como opción de pago, esto podría proporcionar al negocio de préstamos una USP para los clientes potenciales que no quieren que el préstamo sea evidente en su cuenta bancaria.

De cara al futuro

Los hogares con bajos ingresos de EE.UU. han sido los más afectados por el desempleo y se enfrentan a retrasos en los pagos de los cheques de estímulo del gobierno en efectivo. El retraso en los pagos podría traducirse en facturas de préstamo más elevadas. Por ello, a la hora de pensar en el futuro de los reembolsos de préstamos, hay que tener muy en cuenta la posibilidad de aceptar dinero en efectivo tanto en línea como fuera de línea.

Existe un claro vacío en el mercado para los prestamistas. Y dado que el objetivo clave de la inclusión financiera es abordar el problema de que cuanto menos dinero se tiene, más caro resulta el acceso a la financiación, existe un beneficio altruista en hacer que los préstamos sean fácilmente accesibles y baratos también para el consumidor de efectivo.